25 febrero, 2009

La última película que me hizo llorar


Si pudiera alguna vez captar su atención, si se dirijiera a mi sin intención de hacerme daño, si me diera la oportunidad de hablarle, sentaría al Nene Girasol en mis rodillas y le diria:


"Esto es lo importante: nunca es demasiado tarde para ser quienquiera que desees ser. No hay límite en el tiempo. Para cuando tú quieras parar. Puedes cambiar o permanecer igual, no hay reglas sobre esto. Podemos hacer lo mejor o lo peor (sacar el mejor o el peor provecho). Y espero que tú hagas lo mejor. Espero que sientas cosas que nunca hayas sentido antes. Espero que veas cosas que te dejen fascinado. Espero que conozcas personas con diferentes puntos de vista. Espero que vivas una vida de la que te sientas orgulloso, y si descubres que no lo estás... espero que tengas la fuerza para empezar de nuevo otra vez".


¿Quien sabe? Quizás llegue finalmente el día en el que el Nene me haga caso y haga la vida de los dos considerablemente mas fácil.

2 comentarios:

Verborrágica dijo...

Hablando de empezar de nuevo... tengo la contracara para tu película. No será que el Nene Girasol se cruzó el oceáno y lo tengo por acá haciendo maldades?

Unknown dijo...

Es un nene extraordinario!! y hace caso!